13.3.09

Concha!

Contrario a la creencia popular, los viernes 13 son de buena suerte para mí (en viernes 13 nací pues, ante la histeria de mi abuela materna que por poco llegaba al hospital con ajos al cuello). Curiosamente, este año, a sólo 3 meses de empezado, van ya 2 de estas fechas.

Hoy, la suerte se hizo presente. Hambriento, llegué hoy a clase e inmediatamente acudí a la chef no. 1 de todo Campus Guadalajara: la máquina dispensadora. Después de pensarlo un rato, me decidí por unas conchas Alta Fibra (mucho pan por sólo 7 pesitos). Inserto las monedas, marco unos numeritos y ¡oops!... ¡por eso no estaba seguro de escogerlas! fue lo primero que pensé cuando vi que las conchas se quedaban atoradas, pero en el ultimo instante... ¡plop! ¡plop! y dos paquetes de conchas cayeron para mi regocijo.

Una pregunta existencial llegó a mi mente: ¿habré hecho algo malo? Digo, estas maquinitas tan automatizadas como son, no tienen ningún mecanismo que acepte devoluciones. Además, de haberlas dejado ahí, alguien seguramente las habría tomado.

¿No?